POPAYAN COLOMBIA.. AÑO NUEVO EN CARRETERA

Nos encontrábamos en el aeropuerto de Medellín, esperando que haya algún cupo disponible, pero por ser casi fin de año, todos los vuelos estaban llenos, no había cupo, esperamos una hora y nada, nunca conseguimos vuelo, es por ello que fuimos hacia el terminal terrestre de Medellín para viajar por carretera, lamentablemente por ser casi año nuevo los buses ya no salían, el último bus sólo llegaría hasta Popayán (a 6 horas de la frontera con Ecuador), continuamos nuestro viaje por carretera de Medellín a Popayán; me sentía relajada por tal viaje que había hecho, había cruzado toda Colombia pasando momentos inolvidables, estaba feliz que no pensaba donde pasaría el año nuevo, donde el destino me lleve; y así fue, personalmente pasé uno de los mejores año nuevo.

El 31 de diciembre a la 10pm llegamos a Popayán estábamos cerca de la frontera con Ecuador. Popayán, es una ciudad muy tranquila, una de las más antiguas de América. En el terminal de Popayán ya no salía ningún bus, y todas las agencias estaban cerradas. Fuimos a buscar un hotel cerca al terminal para poder viajar al día siguiente a primera hora. El hotel donde nos hospedamos era familiar, en la recepción nos recibía una señora y su hija, muy amables. Se acercaba la media noche para recibir el año nuevo, empezó a sonar la música. Salimos a recibir las doce, en la calle se encontraban las familias listas para recibir las doce, en la puerta del hotel habían dos parlantes donde se escuchaban vallenatos colombianos.

Era todo tan sencillo, un pueblo alejado de mi país y de mi familia, observaba sentada en la puerta del hotel la carretera desolada y camiones pasar y unas niñas jugando con la chispita mariposa, no había fuegos artificiales, ni vestidos de fiestas, un señor muy atento invitándome mi primer brindis del año con aguardiente colombiano y aprendiendo a bailar vallenato. La familia del hotel muy amable, servicial y cariñosa, me hizo sentir como en casa, me contagié de la alegría de las niñas y me puse a jugar con ellas, recordé cuando jugaba con mis hermanas con las chispitas mariposas quien tiraba más lejos las chispitas antes que se apaguen. Una noche entre vallenato y aguardiente colombiano. Feliz año!.