MACHUPICCHU UNA MARAVILLA

Llegó el día de conocer la maravilla del Mundo. Me había preparado para tomarme varias fotos, había comprado la noche anterior un polo que decía “Perú”, sabía lo que tenía que hacer cuando este en frente a tal Maravilla.

Machu Picchu ubicado sobre una elevación rocosa unida entre las montañas Huayna Picchu y Machu Picchu. Considerada dentro de las 7 maravillas del mundo moderno.

Día Domingo de Octubre; hicimos cola para subir a Machupicchu, había bastante gente para subir en el bus porque los Domingos es gratis el ingreso a la ciudadela para todos los Cusqueños, habían bastantes escolares. Compré sólo el ticket de subida porque quería bajar de Machupicchu al pueblo a pie. Llegamos a las 10 am. Wow!!!... el silencio me invadió, quedé maravillada, era increíble tan hermosa vista, sin palabras. El sol quemaba, había tantos lugares donde tomarse fotos hermosas.

Lo primero que hice fue subir hasta lo más alto, y tomar un descanso echada disfrutando de la maravillosa vista, me recargué de energías descansando en lo más alto por 15 minutos de pronto al abrir los ojos lo primero que vi fue la ciudadela con el Huaynapicchu al fondo, esa vista es maravillosa, la sensación es increíble, te desconectas del mundo y de pronto es lo primero que ves. Impresionante!. Es asombroso el panorama.

Y empezamos nuestro recorrido por toda la ciudadela: El Intiwatana o reloj solar, el Templo del Sol, el Templo de las Tres Ventanas, el templo principal, la Plaza Sagrada y muchos más; en cada rincón tomaba fotos, Es realmente uno de los mejores lugares que he visitado y volvería. Al observar las rocas inmensas me preguntaba cómo es posible, es impresionante. Una ciudadela hermosa, majestuosa te rindes ante tanta maravilla.

Bajamos de Machupicchu a pie, ese era mi reto nos demoramos 2 horas, bajamos con una peruana y un español el camino muy accidentado, los escalones empedrados, de diferentes tamaños. Fue tan emocionante, una vista y paisajes espectaculares. Es recomendable usar repelente, zapatillas cómodas y llevar una botella de agua. Yo definitivamente recomiendo bajarlo a pie, si te gusta la aventura y la caminata, te fascinará.

Sé que regresaré para subir el Huaynapicchu (montaña joven), debo hacer la reserva con unos meses de anticipación.

Nuestra última noche en Aguas Calientes, salimos a disfrutar de una cena tranquila, un brindis y una conversa sobre tal imponente y mágico lugar que habíamos conocido, como podría ser realidad tanta maravilla que habíamos puesto frente a nuestros ojos, una experiencia única.

Y tu aceptas viajar a Machupicchu?...

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